jueves, 30 de junio de 2011

LA MÁS BONITA


El otro día me preguntaste que por qué tú. ¿Por qué te amo a ti i no a otra? ¿Por qué tienes derecho a ser feliz mientras otros no lo son? ¿Por qué te sientes tan bonita cuando hay chicas más guapas que tú?
Eso me hizo reír. ¿Y cómo no amarte, cariño? ¿Cómo no querer ver tu sonrisa todos los días? ¿Cómo no enamorarse de tu ingenuidad? Llegaste a mi vida como un tornado descontrolado y lo pusiste todo patas arriba con tu sinceridad desconcertante. Pero no me arrepiento de ni un solo segundo vivido a tu lado.
Junto a ti conocí la felicidad. ¿Que cómo lo sé? Sólo me hace falta mirarte a los ojos para tener la certeza más absoluta. Para saber que, pase lo que pase, mi corazón es tuyo para siempre. Solo puedo darle gracias a la vida por dejar que un ángel con zapatillas de colores se dejara caer en mis brazos, trayendo la primavera a mis días.
Nunca lo dudes, pequeña. Tú eres la más bonita.

domingo, 12 de junio de 2011

TU SONRISA

Un gesto tan simple y tan complejo a veces. Una expresión que puede contener tanto alegría como tristeza y resignación, capaz de transmitir sentimientos y sensaciones. Tu sonrisa. El aire que llena mis pulmones todos los días, el arcoíris que llena de color mi cielo cuando el mundo se convierte en un lugar monótono y hostil. Quiero ver la sonrisa que al principio era de amistad y se convirtió en una de amor, cuando apenas unos pocos milímetros separaban nuestros labios. Quiero ver una sonrisa de ánimo en los momentos difíciles y, a pesar de que quisiera poder evitarlo, una de dolor cuando suframos los estragos de la vida, pero siempre acompañada de una de esperanza.  También quiero una sonrisa de miedo a perderme y que se convierta en una de alegría al comprender que eso nunca ocurrirá.  Quiero que pasemos muchos años juntos y que de forma inconsciente, traces una sonrisa de melancolía al recordar el día en el que nos conocimos. Quiero que me dediques mil sonrisas diferentes, quiero poder disfrutar de la sensación de calidez que me invade cada vez que te miro y veo que tu gesto es sincero, que es mucho más que simple rutina.
Por eso te pido simplemente: sonríe.